Mientras son robados y roban (dum rapiuntur et rapiunt), mientras el uno destruye la paz del otro (dum alter alterius quietem rumpit), mientras se hacen desgraciados mutuamente (dum mutuo miseri sunt), la vida pasa sin fruto (vita est sine fructu), sin verdadero placer (sine voluptate), sin ningún progreso mental (sine ullo profectu animi). Nadie tiene la muerte a la vista (nemo in conspicuo habet mortem), nadie hay que no extienda sus esperanzas a lo lejos (nemo non procul spes intendit). - Séneca, De Brevitate Vitae xx, 5